La juventud no tiene por qué estar reñida con la experiencia, y tampoco con el talento. En la Guarida Creativa lo vemos diariamente en nuestros coworkers de la agencia creativa Cumbre, especializados en consultoría creativa y dirección audiovisual.

Con tan sólo 22 años, David y Adrián ya son sus propios jefes y cuentan con clientes de renombre como UNICEF, Cáritas, el grupo Meliá, y la multinacional de construcción Sarens.

Desde que a los 6 años David ofreciera un bocadillo a Adrián en el colegio ya no se han vuelto a separar. Son dos caracteres diferentes pero con idénticas formas de entender el emprendimiento y el trabajo. Compenetración total a la hora de concebir un proyecto de manera global.

Las experiencias poco enriquecedoras que han vivido en los trabajos por cuenta ajena donde han estado y el no sentirse valorados les motivó a dar el gran salto: “era el momento de arriesgar para que el beneficio de todo este esfuerzo sea tuyo y no el de otros. Que sea de la empresa para la que trabajas, pero que sea la tuya”, comentan David y Adrián.

Los cimientos del proyecto de Cumbre

Los inicios de Cumbre fueron duros, como los de la mayoría de los emprendedores que empiezan un proyecto por su cuenta. Además, venían marcados por una desilusión en el modelo  educativo, ya que algunos de sus profesores les dijeron que no llegarían muy lejos: “los estudiantes creativos no tienen hueco en el sistema educativo actual”.

Ahora, al mirar hacia atrás, agradecen no haber tenido una ruta regular en su etapa educativa para darse cuenta de dónde están actualmente, con las ideas muy claras.

Studio Cumbre- estudio creativo

Este concepto de emprendimiento queda plasmado en la nueva web de We Are Cumbre, un portal fresco, con una imagen cercana y amable, en la que ya te puedes hacer una idea de su negocio y su forma de trabajar, donde destaca su visión creativa y la involucración en cada proyecto.

Y ¿cómo consiguieron su primer proyecto?: «comenzamos a buscar trabajo a puerta fría, llamando negocio a negocio con unas tarjetas de visita”.  Y pateando la calle, mientas descubrían lo duro que es hacerse un hueco en el sector del diseño audiovisual, consiguieron su primer cliente.

Las oportunidades de trabajar en un coworking

Con este primer proyecto grande, David y Adrián vieron la necesidad de buscar un lugar para trabajar mejor, “llevar a un nivel 2.0 el estudio, potenciar nuestra creatividad y poder recibir visitas”.

Y así llegaron a la Guarida Creativa de Móstoles para convertirse en los coworkers más jóvenes de toda la Guarida, una red de emprendedores que supera ya los 200 profesionales de la zona sur de Madrid, que establecen sinergias y vínculos laborales.

Estas colaboraciones no se hicieron esperar y, en apenas un mes, Studio Cumbre ya ha empezado a trabajar y colaborar con otros coworkers. Ya son muchas las ideas de desarrollo que se han planteado con otros compañeros y muchas de ellas darán sus frutos  pronto. Aquí os dejamos una de las piezas audiovisuales que han creado para La Guarida Creativa. Los ‘Monkeys’ también nos apuntamos al fenómeno ‘Mannequin Challenge’.

Si queréis conocer más trabajos de Cumbre podéis verlos en sus redes sociales.

Abrir chat
1
Escanea el código
Hola, estas en la Web de La Guarida Creativa:
¿En que podemos ayudarte?